Reflexión previa.
Desde hace tiempo se ha conseguido reflejar de una forma muy fidedigna prácticamente cualquier imagen: paisaje o retrato. En cambio, el mayor reto consiste en poder plasmar de alguna forma la personalidad del retratado.
Pensemos en alguien cercano, cuya personalidad conozcamos bien. Ciertas fotografías reflejan mejor que otras su verdadero carácter, sin duda cuando están tomadas con naturalidad. En cambio, si tuviéramos que recurrir a una pintura para transmitir el interior de esa persona, ¿de qué herramientas dispondríamos?
¿El color predominante para mostrar su carácter?¿Objetos alrededor para indicar sus aficiones?¿La expresión de su rostro?¿La iluminación?.
Veamos un cuadro de principios del s.XX.
André Dérain (1880-1954), Retrato de una joven muchacha de negro, 1913.
![]() |
André Dérain, Retrato de una joven muchacha de negro. |
Aquí hemos visto cómo utilizar el encuadre para transmitir la personalidad en un retrato.
André Derain en Wikipedia, Otras obras del autor, Fauvismo, imagen en tamaño más grande.
¿Qué otros retratos han resultado convincentes por la forma de reflejar fielmente la personalidad del personaje?